Hace mucho tiempo en un lugar lejano había un grupo de colombianos. Eran los años 60 y la ciudad de Monterrey, México, parecía desierta: todos celebraban la Navidad. Nuestro pequeño grupo de colombianos deambulaba por las calles desoladas hasta que unos lugareños los invitaron a pasar las vacaciones en su casa. Aceptaron y a las pocas horas se presentaron, no con postre ni vino, pero con unos discos de cumbia bajo el brazo. Cuenta la leyenda que esos discos nunca salieron de Monterrey, que circularon por toda la ciudad, pasando de mano en mano, de fiesta en fiesta. Y así, la cumbia se ha convertido en una música popular en esta zona de México.
Esta anécdota puede ser más un cuento de hadas que una realidad, pero es una de las muchas teorías que explican un fenómeno difícil de explicar: el éxito de un estilo puramente colombiano en la norteña ciudad de Monterrey. Darío Blanco, antropólogo, sociólogo y autor de la tesis La cumbia como matriz sonora de América Latina, tiene una explicación menos romántica.
La cumbia romántica de los 90
En los 90 la cumbia fue un gran éxito en todo el país. El grupo Sombras, por ejemplo, de la provincia de Jujuy, lanzó su hit que pegó en todas las discotecas, La ventanita del amor.
Por su parte, el grupo Amar Azul y la cantante de cumbia Gilda también hicieron historia en Buenos Aires. Este último, con una fructífera carrera durante 6 años, tocaba en la radio y en presentaciones en vivo con No me arrepiento de este amor, fuiste un corazón valiente.
La llegada de la cumbia a México
La llegada de la cumbia a México es relativamente reciente. En la década de 1940 predominaron los ritmos cubanos dentro de la categoría de «música tropical», que se difundió gracias a la época dorada del cine mexicano. No fue hasta la llegada de Luis Carlos Meyer, músico colombiano, en la década de 1970, que la cumbia comenzó a echar raíces en México.
En México, Meyer conoció a Rafael de Paz y Tony Camargo, quienes compusieron películas con ritmos cubanos. Inicialmente mezclaron ritmos e instrumentos cubanos, predominantes en la época, con colombianos. Trompetas, metales y trombones fueron parte de la primera fusión que crearía la cumbia mexicana, ya que no eran originarios de Colombia.
Una cumbia nacida en el Gran Buenos Aires
A partir de la década de 1940, la cumbia colombiana comenzó a extenderse a otros países latinoamericanos. Fue así como surgieron subgéneros como la cumbia argentina, la cumbia mexicana, la cumbia peruana y la cumbia venezolana, entre otros.
Entre los instrumentos más comunes en las bandas de cumbia tradicional se encuentran los tambores, la gaita colombiana, la flauta, el maracón y el gouache. Las diversas adaptaciones del género pueden incluir violines, acordeones, flautas y teclados.