Si quieres saber cómo nació la notación musical, en este post te presentamos un documental de Howard Goodall (compositor y presentador inglés) que muestra un breve recorrido histórico de la notación musical. «En los monasterios del primer milenio cristiano, la única música que quedaba del período romano eran los cantos gregorianos memorizados».
El debut con Pentothal
El verdadero debut de Andrea Pazienza, es decir, en un oficio como dibujante con un salario regular, se produjo en 1977 con Alter Alter, la revista fundada de Oreste del Buono, célebre escritor y guionista italiano. Pazienza se presentó en la redacción con 10 viñetas de un cuento, “Las extraordinarias aventuras del pentotal”, que asombró a todos, comenzando por los dibujos y terminando con su narración.
El nombre de Pentothal, un personaje que se parece a Patience, por cierto, proviene del suero de la verdad que utiliza Diaboik para obtener confesiones. Y The Extraordinary Adventures of Pentothal, obra publicada del 77 al 81 sobre Alter Alter, fue una verdadera confesión del autor. Era una historia generacional que narraba las aventuras de un joven atrapado en una realidad de la que no puede escapar.
Partituras en el siglo XVI
El grabado mecánico de planchas se desarrolló a finales del siglo XVI, aunque la inscripción en planchas se había utilizado desde principios del siglo XV para crear artes visuales y mapas, no se aplicó a música hasta 1581.
En este método, se graba una imagen especular de una página entera de música en una placa de metal, luego se aplica tinta a los surcos y la impresión musical se transfiere al papel.
Era moderna en huecograbado
La limitación de los tipos móviles era que eran demasiado estáticos, lo que hacía imposible duplicar muchos detalles en los manuscritos. Por ello, los impresores recurrieron a otras técnicas de impresión, entre ellas el huecograbado. El proceso consistía en hacer grabados con las líneas, notas y texto directamente sobre una plancha. Posteriormente se llenaron de tinta y se utilizaron para estampar sobre papel los citados grabados. El resultado de la impresión fue del más alto nivel, tanto para editoriales musicales como G. Henle Verlag siguió realizando la calcografía manual en sus partituras hasta el año 2000.
Inicialmente los grabados en las planchas se realizaban de forma libre y manual. luego se crearán herramientas específicas para cada elemento: