El desarrollo de la luthería a finales del siglo XVI fue notable.
El violín, en particular, está prácticamente perfecto después de 1600.
En concierto
Además de la presentación del jueves 25, Jorge Glem anunció que el 24 de julio estar en la celebración de los 130 años del teatro Baralt, en Caracas.
Ahora también toca con la flautista Zulia Huáscar Barradas, y próximamente viajará con él a México. Además, junto a Emilio Lovera y Amílcar Rivero, ofrece su talento en la comedia Emigrante yo, que los llevará por Miami, Panamá y Europa.
Bajo
¿Qué tal un poco de bajo para empezar? Bueno, muchas personas prueban el bajo con la esperanza de que sea más fácil que la guitarra. En cierto sentido, esto es cierto: solo hay cuatro cuerdas. Sin embargo, las cuerdas de un bajo son mucho más gruesas y los trastes (esas líneas verticales en el mástil) están más separados.
El bajo se adapta a ciertas personas, tanto porque les gusta el sonido de las notas bajas, como por la longitud del mástil (que se adapta a algunos cuerpos más grandes y dedos más gruesos). Sabrá si el bajo es adecuado para usted tan pronto como elija uno y lo pruebe.
Fagot
El fagot funciona mediante la vibración de una caña doble. Fue creado en el siglo XVIII y mide 155 centímetros de largo. Poseedor de un registro de hasta tres octavas y media, el fagot es miembro oficial de las orquestas sinfónicas, siendo adoptado también en otros géneros musicales como el jazz, el rock y el flamenco. A lo largo de su historia ha intervenido en las grandes corrientes musicales, como el barroco, el clasicismo y el romanticismo.
Actualmente existen dos tipos de sistemas para el fagot: el alemán (tocado en casi todo el mundo) y el francés (muy popular en Francia, por supuesto). Al ser un instrumento pesado, el ejecutante debe tocarlo normalmente sentado, sujetando el fagot con una correa o arnés y apoyándolo sobre el lado derecho.
⭐ Qué tipo de música quiero tocar
Si no te gusta el bluegrass, definitivamente el banjo no es para ti.
Imagínate hacer el esfuerzo de apuntarte para aprender a tocar un instrumento y que las canciones que te gustan y que más te motivarían a sacar no tienen el instrumento que estás aprendiendo… Claro que se puede ser algo bueno deprimente.