En el caso de los cantantes y músicos esa audiencia es el público. Que sea mayor o menor, podemos sentir miedo escénico igualmente. En el momento en el que nos ponemos delante de una audiencia y empecemos a cantar, pueden ocurrir dos cosas:
- Bloqueo absoluto con la incapacidad de proseguir con la actuación.
- Empezamos a relajarnos poco a poco y todo empieza a fluir.
Consejo número 1: usa la lógica.
INDICE
Muchas veces nos da miedo salir al escenario porque creemos que no tenemos talento suficiente para gustar a ese público y, por el miedo a hacer el ridículo, nos entra el síndrome del palo de escoba, que consiste en que empieza a parecer que te has tragado un palo de escoba porque ni te mueves ni expresas ni nada. Te propongo que pienses lo siguiente: esa gente está pagando por estar ahí. Si no están pagando con dinero, están pagando con su tiempo, que es mucho más valioso. Y si han ido allí es para que los entretengas. Te garantizo que si tienes miedo escénico no vas a sobreactuar, así que no tengas miedo y dalo todo.
Además, es muy importante que te hagas consciente de que el miedo escénico es un miedo totalmente irracional. Por subirte a un escenario a cantar una canción nadie te va a odiar, nadie te va a matar, ni a pegar, ni te vas a morir. Cuando acabes, te bajas del escenario y sigues con tu vida, haya pasado lo que haya pasado y aunque lo hayas hecho fatal. Además, lo vas a hacer genial. Estás ahí porque te encanta cantar, porque tú quieres, y porque es el sueño de cualquiera estar en un escenario con un público aplaudiéndote. ¡Disfruta de cantar!
¿Negarlo o validarlo?
Expectativas altas acerca de lo que creemos que deberíamos rendir en escena y un falso respeto hacia nosotros mismos suelen ser socios de este fantasma. Me parece importante aclarar que no considero que haya que negarlo, la experiencia se debe validar, dar lugar a lo que sentimos es clave para poder hacer un cambio.
El miedo desmedido a la crítica negativa de los otros muchas veces muestra la clase de vínculo que tenemos con nosotros mismos, por eso es clave para mí una buena guía, un maestro que acompaña y enseñe al alumno la aceptación positiva incondicional sobre el mismo.
Paso – El día de la presentación
- Descansa.-
No hay nada mejor para la voz que un buen descanso de 8 horas. No subestimes este consejo porque tu garganta es parte de tu cuerpo. Si te sientes cansado, tu garganta también lo estará. Descansa.
Ser más sociable ayuda a cantar en público
¡Parece mentira!, pero ser más sociable te ayuda a cantar en público. Diversos estudios han demostrado que ser más sociable ayuda a superar tus miedos. A mí me cuesta mucho trabajo interactuar a pesar de que no me considero una persona particularmente tímida pero al mismo tiempo, tampoco soy alguien muy sociable.
Recuerdo que varios de mis maestros en la Escuela Nacional de Música de la UNAM, me regañaban por cantar todo el tiempo con los ojos cerrados. Me decían que tenía que ver al público para que no se sintieran ignorados.