Usar páginas web para eliminar las voces de una canción es una opción bastante asequible y sencilla. Internet tiene varios programas en línea que facilitan la eliminación de voces en diferentes canciones. Esta sección explicará las 5 mejores herramientas en línea para eliminar las voces de una canción.
Este es un programa en línea que te permitirá separar la voz de la pista de fondo. Para que pueda tener dos archivos diferentes que son completamente utilizables para cualquier otro propósito artístico. Para eliminar las voces de una canción usando Vocal Remover, sigue estos pasos:
Importancia de saber crear ritmos
Los instrumentos o pistas de acompañamiento son probablemente el elemento más importante de un tema. Cuando escuchas música, puedes entenderla e incluso leerla, pero te será muy difícil escucharla a menos que haya un ritmo detrás que acompañe la letra y la voz, y así ha sido desde el principio. de tiempo.
¿Qué es una canción sin música, aparte de la poesía? Por eso, un profesional del mundo debe conocer todos los ritmos, las mejores bases y, sobre todo, cómo hacer ritmos de calidad de forma profesional. ¡Debes ser el mejor de tu generación!
Voz y música separadas
Ambos instrumentos son muy similares. Ambos se abrieron desde el navegador web. Un rectángulo parpadeante explica que debemos arrastrar y soltar el archivo que queremos separar allí. Puede estar en formato MP3 o WAV y hasta 80 MB de tamaño. El límite de duración de la canción de unos 10 minutos.
En palabras de sus creadores, tanto Acapella Extractor como Vocals Remover son de uso gratuito y no requieren registro. Y para que os hagáis una idea de cómo funciona, hay varios ejemplos tanto de Acapella Extractor como de Vocals Remover.
Elimina las voces de una canción gratis
Vocals Remover es de uso gratuito y limita su uso a siete canciones por semana.
Ahora sí, ¿vamos a aprender a calcular los tiempos por minuto de una canción?
Lo primero que debes hacer es escuchar con mucha atención la canción, no estamos hablando de cantarla porque te vuelva loco, todo lo contrario. Siéntate, cierra los ojos, evita cualquier otro ruido y escucha atentamente. Ahora intente mantener el ritmo de la música con el pie, la cabeza o la mano. Cada uno de esos trazos o movimientos que das es un pulso o latido.